- Es una de las investigadoras más destacadas en áreas como el periodismo y la comunicación digital, y será conferencista magistral en ICOMTA’25, en Valdivia, Chile, del 2 al 4 de septiembre

Hace casi tres décadas que Bella Palomo, Catedrática de Periodismo en la Universidad de Málaga (UMA), comenzó a investigar sobre periodismo y comunicación digital en España. Justo cuando los medios de comunicación, tímidamente, se asomaban a la red con portales de la web 1.0 —auténticas tarjetas de visita para un entorno que, por aquel entonces (cómo ha pasado el tiempo), resultaba incierto y hostil para sus modelos de negocio—, Bella publicaba el libro El periodista on line: de la revolución a la evolución (2004), anunciado como “el primer manual de supervivencia para el ciberperiodista del siglo XXI en lengua española”. Desde entonces no ha parado: actualmente co-dirige un proyecto financiado por el Ministerio de Ciencia sobre inteligencia artificial y periodismo, es Decana de la Facultad de Ciencias de la Comunicación, y ha sido profesora visitante en universidades de Washington, Nueva Jersey, Miami, Pernambuco, Bahía y Shanghái, entre otras. Este año, además, es conferencista magistral de ICOMTA’25, que se desarrollará en Valdivia, Chile, del 2 al 4 de septiembre.
Equipo ICOMTA – Desde sus primeros trabajos, pioneros en español en el estudio de las relaciones entre medios de comunicación y tecnología, parece que ha pasado un siglo. Hemos transitado desde la necesidad de adaptar modelos de negocio a un escenario marcado hoy por la irrupción de la inteligencia artificial, que permite generar contenidos a gran escala, de forma accesible y con muy poca intervención humana… En 2004, cuando se publicó El periodista on line, mencionaba que había medios como Journal Interactive que contaban con tres áreas en línea: “editorial, tecnología y publicidad” (p. 102). Después de tantos años, ¿siguen los medios siendo resistentes o tecnófobos frente a la innovación tecnológica?
Bella Palomo – El ecosistema mediático ha vivido una transformación vertiginosa. Su dinamismo actual no era predecible en 2004, y lo que era revolucionario en aquella época se ha convertido en rutinas normalizadas en la actualidad. La respuesta de las empresas ante los avances disruptivos, como la inteligencia artificial generativa, siguen provocando brechas y redacciones de dos velocidades, diferenciando entre quienes apuestan por integrar la tecnología con naturalidad e incluso entusiasmo para automatizar parte de sus tareas o personalizar contenidos, y quienes se resisten por el temor a ser sustituidos por decisiones algorítmicas. Esa tecnofobia es lógica, porque la velocidad del cambio no tiene precedentes, y genera inseguridad. ChatGPT logró 100 millones de usuarios durante sus dos primeros meses, y el entrenamiento superó todas las expectativas, con actualizaciones permanentes.
La paradoja es que hoy los medios no pueden permitirse el lujo de la resistencia tecnológica, porque está en juego el lugar del periodismo en la sociedad digital. No se trata de elegir entre tecnología o ética, sino de hacerlas convivir. Hay que hacer pedagogía para asumir que la innovación no es un enemigo del rigor, sino su mejor aliado cuando se pone al servicio de los principios fundamentales de la profesión.
Equipo ICOMTA – Su trayectoria académica —si nos lo permite— refleja muy bien las distintas líneas evolutivas del ecosistema digital. En el libro mencionado se proponía dotar de capacidades a los ciberperiodistas emergentes; más adelante, investigó las actitudes y la activación de las audiencias —como co-creadoras del mensaje en línea—; pasó luego al estudio de la innovación tecnológica en los cibermedios y, en los últimos tiempos, se ha enfocado en los efectos negativos, como la desinformación. Actualmente trabaja en un proyecto sobre IA y periodismo. ¿Hasta qué punto cree que esta tecnología es una aliada o una amenaza potencial que requiere de una mayor regulación?
Bella Palomo – No debemos adoptar una posición dicotómica ante una tecnología. En el ámbito del periodismo, no cabe duda de que la IA es una herramienta poderosa para mejorar la eficiencia y ampliar el alcance de la información gracias a su capacidad para automatizar procesos, personalizar contenidos o asistir en tareas de verificación. Pero debemos ser conscientes de que esas fortalezas conviven con riesgos, como su opacidad algorítmica y su influencia en la creación de sesgos en la generación de contenidos, o la difusión masiva de desinformación difícil de rastrear. Esta nueva realidad exige una mirada crítica, ética y regulatoria, que garantice la trazabilidad del contenido, la transparencia de los procesos, la rendición de cuentas y la preservación del interés público. Y debe acompañarse de una alfabetización algorítmica de la sociedad para disponer de la capacidad de ser agentes activos en el consumo, diseño y aplicación de la inteligencia artificial.
Equipo ICOMTA – Pero usted también tiene una mirada de directiva, como Decana de una de las Facultades de Comunicación más grandes y activas de España. A ICOMTA’25 asistirán muchos líderes de programas educativos iberoamericanos… Desde su punto de vista, ¿cómo puede la oferta formativa responder críticamente a estas transformaciones impulsadas por la tecnología?
Bella Palomo – Creo firmemente que la universidad no solo debe acompañar los cambios tecnológicos, sino anticiparlos con una propuesta formativa crítica, ética y transformadora. Reconozco que resulta complejo porque el sistema burocrático limita nuestra iniciativa, y en España desde que se diseña una propuesta hasta que se puede implantar puede pasar con suerte unos dos años. La innovación tecnológica avanza más rápido que la capacidad normativa o educativa para integrarla y es una gran responsabilidad acertar con un modelo cerrado cuando la comunicación se transforma constantemente.
Por eso, es fundamental que los programas de comunicación no se limiten a enseñar herramientas o competencias técnicas, sino que generen profesionales críticos, que puedan cuestionar e identificar los impactos sociales, políticos y culturales de la tecnología, porque ésta nunca es neutra.
Equipo ICOMTA – Por último, ¿hay alguna idea que le gustaría adelantarnos sobre su conferencia en ICOMTA’25?
Bella Palomo – Va a ser mi primera visita a Chile y con mucho cariño estoy articulando una conferencia provocadora y necesaria bajo el título “Buscar la verdad en la era de la inteligencia artificial generativa”, porque actualmente está en juego no solo el futuro del periodismo, sino el de la ciudadanía bien informada. El punto de partida es demoledor: la verificación de un hecho nunca será tan viral como el contenido falso. Debemos por tanto reconocer el daño que produce la desinformación, que la democratización de la IA facilita la creación y difusión de manipulaciones, y por ello debemos construir una ciudadanía resiliente. Esta constituye nuestra misión, no imposible, pero sí responsable.
Equipo ICOMTA – ¡Muchas gracias, Bella! Le esperamos con mucho entusiasmo en Valdivia. Estamos seguros de que las ideas de alguien que ha investigado prácticamente todos los aspectos de la relación entre comunicación y tecnologías aplicadas serán de enorme interés para generar nuevas ideas y discusiones.
Para más información sobre ICOMTA’25 y los últimos días de la convocatoria de ponencias actualmente abierta: https://icomta.net/ Se puede asistir de forma presencial o en línea.
